El Amor en Tiempos de Posmodernidad y Redes Sociales

¿Qué es el amor? ¿Cómo definir algo tan complejo, contradictorio y fascinante? No podemos observarlo con microscopio, hay quien lo define en términos químicos y quiénes hacen poesía de él. Amor es inspiración, a veces sufrimiento, amor es encuentro y a veces desencuentro…

El amor es la emoción que nutre al bebé que acaba de nacer, la que nos ayuda a crecer, la que nos hace sentir parte de un grupo social. Decía Mahatma Gandhi que “donde hay amor hay vida”.

Pero, ¿cómo nos manejamos con el amor hoy? ¿Son las redes sociales aliadas o enemigas a la hora de vincularnos con esta emoción? ¿Somos responsables afectivamente con lxs demás?

Zygmunt Bauman, sociólogo polaco, creó el concepto “AMOR LÍQUIDO” para describir el tipo de relaciones interpersonales que se desarrollan en la posmodernidad. Relaciones caracterizadas según él por la falta de solidez, calidez y por una tendencia a ser cada vez más fugaces, superficiales, etéreas y con menor compromiso.

El amor líquido hace referencia a la fragilidad de los vínculos sentimentales, a la necesidad de no establecer lazos emocionales profundos para permanecer desvinculados emocionalmente y poder encajar en un entorno que cambia constantemente.

Propio de esta sociedad, donde impera la información y el consumo, las personas dan más valor a la experiencia presente, a la libertad sin ningún tipo de ataduras, al consumo puntual y poco responsable y a la satisfacción inmediata de las necesidades corporales e intelectuales. Todo aquello que no cumpla con esa inmediatez, es desechado.

Las redes sociales también son parte de esta construcción, deconstrucción o destrucción del “amor”, como medio de comunicación que nos permite generar un contacto con otras personas. Establecer nuevos vínculos o mantener los que ya tenemos. Nuestra forma de relacionarnos mediante estas redes puede ser sano o no tanto. Dentro de las redes existen muchos comportamientos de manipulación emocional con nombre propio. Entre ellos:

GHOSTING (o fantasmear)

Sin previo aviso la persona con la que te estabas escribiendo desaparece de la noche a la mañana, sin ningún tipo de explicación. Ghosting refiere a cuando una persona de manera inesperada corta todo contacto con otra persona con quien estaba manteniendo comunicación, como manera de dar fin a la relación, sin decir ni avisar nada.

Las consecuencias que esto genera para la víctima es un daño en su autoestima así como atravesar un duelo sin tener respuestas sobre los motivos de la ruptura o desaparición. Para quien lo ejerce deberá como consecuencia, hacerle frente a los remordimientos y al sentimiento de culpa por haber dejado a alguien de esta manera. Evitación y miedo al conflicto pueden ser, entre otros, algunos causantes.

BENCHING (“estar en el banco” de suplentes)

Cuando una persona te escribe y después te deja de escribir, o te deja en visto y a las semanas aparece como si nada. Un día te coquetea y después no te escribe, nunca llegando a concretar nada.

Es una forma de mantener interesadx a alguien con quien no buscas una relación sino solo pasar un buen rato. "Dejar la velita prendida". Se trata de mantener el interés en unx de la otra persona mediante respuestas y mensajes confusos y engañosos, pero sin otra intención más que tenerlx ahí en la espera. No está mal tener opciones, lo malo es cuando ilusionas a esa persona o le das falsas esperanzas.

ORBITING (o desaparecer pero no del todo)

Cuando una persona te mostraba interés pero después dejó de escribirte, aunque merodea tus redes likeando, comentando o mirando tus historias."No entiendo, ya no me escribe pero me da like, mira mis historias". En eso consiste, en deambular por tus redes pero sin intención de generar una relación. Es una forma de llamar tu atención sin interés, o tenerte enganchadx por si algún día retoma interés en vos.

CURVING (mensajes esporádicos o esquivos)

Una forma de responder a invitaciones de forma evasiva y suavizada, sin decir que no hay interés. Se utiliza para deshacerse de un/a pretendiente, y por el modo en que se lleva a cabo es probable que ni siquiera se vea como un rechazo. Mensajes que posponen los encuentros o excusan las no respuestas, pero que no asumen el desinterés. No quieren hablar más con la persona pero no saben cómo terminarlo.

Esto sucede por miedo a quedar mal con el otro, por temor a que la otra persona se ofenda, miedo al conflicto o problemas para expresar de buena manera las emociones que realmente siente.

¿Qué hacer en estos casos? Comunicarse con sinceridad para no lastimar ni ilusionar a nadie y prestar atención a nuestras formas de vincularnos.

Mantenemos relaciones con fecha de vencimiento, tenemos vínculos cada vez más débiles y promovemos constantemente la idea de que también las personas son consumibles, poniendo en lugar de objetos a las potenciales parejas sexuales.

Para que una pareja sentimental funcione, según Bauman, tenemos que eludir la idea de esclavitud y reconocer que la libertad y la seguridad pueden coexistir en armonía.

Saber cuánto valemos, poner en práctica el amor propio reconociendo y marcando límites para con nosotrxs y el resto, son bases fundamentales de los vínculos que construimos, de las acciones que permitimos. Ser honestxs con lxs demás y con nosotrxs respecto a lo que queremos.

Saber cuánto valgo y qué merezco, al final de cuentas el amor que me doy es un reflejo del amor que crea y sienta que merezco recibir.

Guadalupe M. Cumin Lic. en Psicología M.P. 9882 @psicoguadacumin

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